El diagnóstico integral de fertilidad

Publicado el 13/09/2021

El diagnóstico integral de fertilidad de la pareja permite averiguar cuáles son vuestras probabilidades reproductivas de la forma más completa. Diagnosticar la fertilidad de forma conjunta resulta muy útil, por ejemplo, a la hora de decidir qué tratamiento de reproducción asistida será el más adecuado para vosotros, dado que ante un problema de fertilidad, las causas se deben tanto a factores masculinos como femeninos. En concreto, los datos clínicos de los que se dispone hasta el momento distribuyen el origen de la infertilidad entre el hombre, la mujer o la combinación entre ambos miembros de la pareja en proporciones similares del 32%.

El test MSOME: un gran avance en el análisis de espermatozoides

El test MSOME supone un avance en el diagnóstico de la infertilidad masculina,  ya que permite analizar la morfología de los espermatozoides con mucha precisión gracias a potentes microscopios específicamente diseñados para esta técnica, y permite hacer un diagnóstico preciso de situación  de los gametos masculinos.

A través del test MSOME se pueden analizar de forma muy precisa los espermatozoides, incluso idenficando aquellos con material genético potencialmente dañado. Esto permite obtener un diagnóstico de situación de los mismos muy preciso, a diferencia del semiograma que puede presentar variabilidad en los resultados en función del momento elegido para hacer el análisis.

Aunque cualquier paciente puede someterse al test MSOME, está especialmente indicado en aquellos pacientes con un seminograma alterado o bien en quienes han tenido ciclos fallidos de reproducción asistida.

 

El diagnóstico de la reserva ovárica

En el caso de la mujer resulta fundamental diagnosticar la reserva ovárica mediante dos sencillas pruebas que permitirán conocer sus probabilidades reproductivas: el análisis de los folículos antrales (RFA) y la hormona antimülleriana (AMH), dos marcadores complementarios que confirman la cantidad y la calidad ovocitaria

El recuento de folículos antrales se realiza de manera muy fácil, a través de una simple ecografía ginecológica vaginal que se incluye habitualmente en las revisiones rutinarias. Si durante el periodo menstrual de la mujer se visualizan ecográficamente alrededor de 5 a 10 folículos en cada ovario, se puede considerar que se tiene una reserva óptima.

Como prueba adicional, se puede analizar la hormona antimülleriana, que proporciona información no sólo de la cantidad de folículos ováricos, sino también de la calidad ovocitaria.

Gracias a estas pruebas se puede disponer de un diagnóstico integral de la fertilidad. Consulta con tu especialista y conoce vuestras probabilidades reproductivas como pareja.